TOREARTE
Dentro del marco de la publicidad, me tope con una campaña que me llamó la atención, no solo por su finalidad si no por la calidad de entrega de las imagenes, que aun bastante crudas ayudan a reflexionar sobre el arte de la Tauromaquia: donde los toros son debilitados intencionadamente a través de varios métodos, incluso se les llega a drogar y golpear con sacos de arena con este fin. En una corrida tradicional, al animal se le clavan lanzas en su lomo para romper los músculos de su cuello y desangrarlos. Luego se les clava banderillas para que las heridas no puedan cerrar y la pérdida de sangre continúe. Sólo después de este tormento, el torero comienza a agotar al abatido animal, que colapsa. Se le perfora los pulmones con una espada y luego se le "descabella" con una daga que corta su columna vertebral para inmovilizarlo. Aún consciente, se le encadena y arrastra por la arena, para llevarlo al matadero.
Considerada como una de las campañas más exitosas en censura a las corridas de toros y a todo evento taurino, “Ponte en la piel del toro”, organizada por la agrupación AnimaNaturalis, es más que una protesta o crítica, viene siendo todo un movimiento a nivel internacional que ha tenido sede en España, Colombia y México. Este año en la Ciudad de México se ha hecho una invitación tanto a agrupaciones de protección animal como a artistas (cantantes, músicos, plásticos) y a la sociedad en general a sumarse a esta campaña no solo para censurar, sino para erradicar las corridas de toros y mostrar a la sociedad el crudo salvajismo y tortura a que son sometidos los toros de lidia antes, durante y después de una corrida.
Esta idea y consigna comenzó en 2002 en Pamplona, cuando la organización animalista PETA (por sus siglas en inglés, en español sería Gente por un Trato Ético hacia los Animales), inició una tradición alternativa a la “Pamplonada”: realizar una carrera con unas 25 personas cuyas únicas prendas eran pañuelos rojos, pintura roja en sus cuerpos (simulando sangre) y cuernos falsos, las cuales representaban a los toros que, aterrorizados, son soltados en las calles y que sufren diversos maltratos durante su trayectoria que culmina con su muerte en la plaza de toros. Tuvo tal éxito que el llamado “Encierro Humano” repitió al año siguiente con más de 150 personas de diversas partes del mundo protestando contra el abuso hacia los toros en las fiestas de San Fermín. El número de participantes se ha incrementado desde entonces e incluso el “Encierro Humano” se está tomando como una nueva tradición y han ido aumentando a varios centenares año con año e incluso personajes famosos se han unido a la causa: no a la tauromaquia.
“Ponte en la piel del toro” en Medellín, Colombia
Los “encierros humanos” no pasaron desapercibidos para el resto del mundo, ya que comenzaron a surgir en países como México y Colombia manifestaciones similares. En Colombia, por ejemplo, se calcula que unas 200 personas provenientes de varias ciudades se reunieron por la tarde del 29 de enero del presente en el Parque de los Deseos de la capital colombiana para hacer una performance y pedir la abolición de la tauromaquia. Formando con sus cuerpos semidesnudos una gigantesca figura de un emblemático toro de lidia ensangrentado y ensartado con banderillas, que representaba a los más de mil toros que han sido torturados y asesinados en las corridas llevadas a cabo en la principal plaza de toros de Colombia, La Macarena. La protesta, en la cual se reunieron pacíficamente unos 500 manifestantes, duró casi dos horas, tiempo durante el cual las personas cuyos cuerpos enmarcaron al toro, pudieron sentir emociones intensas incluso cercanas a la vivencia y sufrimiento del toro de lidia durante las corridas.
“Ponte en la piel del toro”, Ciudad de México
México no se ha quedado atrás. Si bien aún es uno de los 8 países donde persisten las corridas de toros, la tauromaquia está en crisis: poco a poco el público va a dejando de asistir y a diferencia de antaño (como en la época entre los cuarenta y ochenta, que era normal que la “gente bonita”, taurina y famosa del momento se diera cita a la par con el pueblo en las plazas de toros), el repudio hacia la tauromaquia ha ido creciendo cada vez más. Ya no se trata de un grupo diminuto de gente que protesta afuera de la plaza de toros, sino de cientos de manifestantes organizados, que el año pasado (2010), por ejemplo, se dieron cita afuera de Bellas Artes y de manera pacífica, artística y simbólica protestaron contra las corridas de toros y el sufrimiento de los toros de lidia durante las mismas.
El domingo 6 de febrero del 2011 fue la siguiente protesta nuevamente en la explanada de Bellas Artes, donde centenares de animalistas, voluntarios, gente sensible y artistas se dieron cita para prohibir las corridas de toros en la Ciudad de México en un evento organizado por AnimaNaturalis y apoyado por decenas de protectoras de animales y público en general en un repudio a esta práctica. Donde procedentes de varios estados de la República Mexicana, más de 300 activistas banderillados y ensangrentados, junto con 300 colaboradores, participaron en la mayor acción contra las corridas de toros en México.
Los activistas banderillados se postraron en las inmediaciones del Palacio de Bellas Artes, en la Ciudad de México, formando la palabra "BASTA" para exigir al gobierno, en todos sus niveles, la abolición definitiva de la tauromaquia.
En apoyo a AnimaNaturalis, la actriz Diana Golden posó desnuda para ser la imagen de esta campaña y defender así a los cientos de miles de toros que mueren anualmente en todo el mundo, víctimas de la tauromaquia.
Prohibición de las corridas de toros
Aunque España ha sido la cuna de la tauromaquia, las personas que se oponen a la misma han ido en aumento, tanto es así que en 2004 se abolieron las corridas de toros en Barcelona y posteriormente, en Cataluña. De hecho, se calcula que más del 70% de la población española rechaza o muestra desinterés en las corridas de toros. En México continúan únicamente por el apoyo de fuertes patrocinadores y televisoras nacionales, pese a que la entrada a las plazas ha decaído notablemente.
Hay corridas de toros “sin sangre”, como las de Portugal, pero la falacia reside en que el animal, aunque no es asesinado en el ruedo, muere desangrado durante las siguientes horas o días, producto de las heridas (banderillazos) recibidas durante la corrida.
Caballos y tauromaquia
No lo pasan mejor que los toros. Entran con una visión muy limitada de lo que ocurre en el ruedo, para que no se pongan nerviosos ni se asusten. No es raro que resulten heridos durante la corrida, pero no se distingue porque van notoriamente cubiertos con un peto especial que oculta sus heridas. Con todo, muchos mueren a resultas de las corridas de toros. Es entonces que el 6 de febrero del 2011 las consignas fueron, además de “ponerse en la piel del toro”, que “la tortura no es arte ni cultura”, siendo la más emblemática, fuerte y contundente, el “basta”, formado en rojo con mayúsculas, con los cuerpos casi desnudos de los participantes.
¿Cómo participar?
Semidesnudo masivo: Cientos de toros han muerto durante 20 años de existencia de Cormacarena, entidad encargada de difundir la cultura taurina en Medellín. Deberemos ser cientos los activistas pintados semidesnudos que se espera participen. ¿Quieres ser uno de ellos?
Voluntariado: Si deseas participar, pero no en el semidesnudo, puedes colaborar en tareas como la preparación de los activistas pintados, el cuidado de pertenencias, hidratación, sostenimiento de pendones y entrega de información al público.
Difusión: Por favor, ayúdanos a difundir al máximo esta convocatoria entre tus contactos, y a través de redes sociales como Facebook, Twitter, MySpace, Hi5, así como en foros y blogs personales. Ya lo sabes: http://www.enlapieldeltoro.org/